* https://siempredepaso.es/la-senda-de-los-almendros-un-paseo-a-pie-por-las-riberas-de-castronuno-valladolid
Si no fuera porque el Duero es mucho río para que le acongoje un castillo cualquiera, parecería que cuando llega al enclave donde se recorta la silueta de la localidad vallisoletana de Castronuño, recula. Claro que ese giro de noventa grados, trazado como con cartabón a los pies del cerro de La Muela, también puede verse como un gracioso corte de mangas. Y aunque está claro que el derrotero de los ríos no se explica con metáforas de cuento, a la vista de la historia de esta localidad, estas dos suposiciones podrían encajarse perfectamente.
Como también es único en la provincia el espacio natural protegido que lleva por nombre Riberas de Castronuño-Vega del Duero. Según los expertos, la importancia de este enclave natural, que tiene al río como eje vertebrador, deriva de la biodiversidad que encuentra cobijo en la franja vegetal que orla ambas orillas del Duero. Y como todo tiene su historia, resulta que esta variedad vegetal y animal que ha hecho de esta marcada curva fluvial su casa es consecuencia, a su vez, de la construcción del embalse de San José, inaugurado en 1945. A pesar de sus pequeñas dimensiones, 6 hm3 de agua y una lámina superficial de 250 hectáreas, la consecuente regulación del caudal en este punto del río ha propiciado el desarrollo de extensos carrizales y choperas en ambas márgenes. Y es precisamente entre esos carrizales y choperas en los que una valiosa variedad de animales encuentran oportuno refugio.
LA SENDA DE LOS ALMENDROS. Recorrido circular con principio y fin en la Casa de la Reserva. Tiene una longitud de unos 4 km que pueden hacerse en unas dos horas. Escasa dificultad y un par de repechos cortos pero algo fuertes. Comparte señalización con el GR.14 hasta alcanzar el arroyo Mucientes. Después la señalización es bastante deficiente aunque se intuye bastante bien el camino a seguir. FOLLETO DEL RECORRIDO EN PDF.
INFORMACIÓN. Casa de la Reserva, tel. 983 86 62 15.
* https://www.terranostrum.es/senderismo/valladolid/montes-torozos/castronuno/1
* https://www.terranostrum.es/senderismo/valladolid/montes-torozos/castronuno/senda-de-los-pescadores-castronuno
* Realizamos 2 de las rutas: La Senda de los Almendros y la Senda de los Pescadores
* https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/reserva-natural-de-las-riberas-de-castronuno-vega-del-duero-valladolid-53964099
Ruta circular que comienza en el mirador de La Muela.
El primer tramo forma parte de la Senda de los Almendros y está muy bien señalizado, con miradores de aves a lo largo de ella. Una vez que se llega a la carretera, se sigue caminando paralelos a ella (dejándola a nuestra izquierda), hasta llegar a la Presa de San José. Continuamos caminando por la carretera de la presa mientras nos deleitamos con la observación de algunas aves. Una vez que cruzamos la presa, giramos por el camino de la derecha, siguiendo el margen del río Duero. Tras caminar unos metros, nos encontramos con la zona deportivo-social de pesca, la cual transitamos hasta llegar al merendero (hay tres mesas con bancos). Desde allí, caminamos a lo largo de la vía de tren (mucha precaución por si viene algún tren puesto que las vías sí que funcionan aunque el edificio esté abandonado) hasta la antigua estación de ferrocarril e iniciamos el retorno a Castronuño por la otra orilla del río, la cual no tiene nada de sombra, a diferencia del primer tramo.
* https://medioambiente.jcyl.es/web/es/medio-natural/riberas-castronunovega-duero-valladolid.html
Las Riberas de Castronuño aparecen como un espacio natural situado al centrooeste de la provincia de Valladolid y cuyo territorio engloba el tramo del río Duero comprendido entre las localidades de Tordesillas y Castronuño. En esta última localidad se encuentra, además, el embalse de San José. Las riberas de Castronuño constituyen un emblemático ecosistema palustre que destaca por su importancia para la nidificación y como zona de invernada de muchas y variadas aves acuáticas.
Un interesante bosque de ribera, formado principalmente por chopo negro, sauce, álamo blanco, fresno y majuelo, acompaña al río en su sinuoso discurrir por la llanura sedimentarla.
Además de embellecer el paisaje, esta formación rupícola sirve de refugio y protección a una gran cantidad de aves, entre las que destacan las importantes colonias de garza real, martinete y garceta común.
En Castronuño también tienen sus refugios invernales una gran cantidad de ánades reales, patos cucharas, porrones comunes, porrones moñudos y cormoranes. Aguas arriba de Castronuño se localiza la interesante localidad de Tordesillas. Villa repleta de conventos, iglesias, palacios y hospitales, entre sus muros se firmaron un importante tratado por el que castellanos y portugueses se repartieron el dominio del mundo de finales del siglo XV.
Un días precioso, con lluvia fína, permitiéndonos disfrutar de colores y olores increíbles, además de un remanso de paz precioso. Y lo más destacable fueron la diversidad de cantos de aves, en un lugar ideal para pasear en primavera, por la variedad vegetal: almendros, pinos, encinas, espino albar, higueras, saucos, alamos, chopos, carrizal, fresnos...
Tuvimos la suerte de encontrarnos a Valentín, más bien, nos encontró él, para recitarnos una preciosa poesía sobre el paisajes y Castronuño. Senda de los Almendros y Senda de los Pescadores. En lo alto del pueblo, se encuentra la Casa del Parque, la preciosa Iglesia y unas vistas del Meandro del Duero.
Una pastelería, confitería, que en breve, abrirá en un lugar privilegiado su nuevo local, con cafetería.